Hoy vengo especialmente ilusionado (con que poco se conforma uno), por fín logré echarle unas fotos a una setilla muy especial. Hombre, analizándolo fríamente no tiene nada de especial, simplemente le tenía ganas desde que me la enseñaron hace ya un par de años. Es la Rutstroemia echinophila. Digo que logré echarle fotos porque, sinceramente, todavía no había salido especificamente a por ella, ya que resulta que se encuentran con relativa facilidad, así que más por vagancia que por otra cosa me la debía. Bien es verdad que es bastante tiquismiqui en cuanto a condiciones y que se degrada muy rápido, pero rebuscando entre la hojarasca, en castañas muy específicas, del año pasado, y, sobre todo, con un nivel de podredumbre óptimo (ésta característica se repite en todas) es fácil dar con ella.
En estas fechas, si uno sigue mirando, seguro que alguna más aparece, pequeñas Mycenas y algún Boletus... y ya para casa.